jueves, 25 de febrero de 2010

No matarás...




Dios nos ayude a vivir en una tierra en donde ni el vientre de la madre es lugar seguro para su hijo. Misericordia Señor.

2 comentarios:

Teresa dijo...

Dios mío, perdónanos. El aborto es una tragedia de tal magnitud que nos afecta a todos. Me estremezco sólo al pensar cuántos niños son abortados cada minuto, en este mismo instante. Recemos por todos ellos, víctimas de sus propias madres... ¡Terrible!. Que Dios nos perdone.

Miserere mei Domine dijo...

Solo la misericordia de Dios nos podrá ayudar a salir de este tremendo estado de barbarie.

Tal como dices, que Dios nos perdone y nos muestre el camino a El.

gracias tus palabras Teresa :)

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